El agua es buena para todo, incluso para darle vidilla a tu creatividad. Gracias a este interés que nos caracteriza por saber todo lo qué pasa alrededor del agua, hemos encontrado esta curiosidad: pintar sobre el agua.

¿Se puede pintar sobre el agua? Claro que sí. Además resulta que, aunque pueda parecer uno de estos inventos modernos que idean personas con mucho tiempo, el “paper marbling” es una técnica pictórica milenaria. Una técnica con la que, por cierto, obtienes resultados chulísimos. Si se te da bien eso de coger el lápiz, serás capaz de hacerlo tú mismo. Ya verás.

El término “marbling” proviene del inglés “marble” que significa mármol. Como véis en las fotos, es un efecto parecido a los dibujos que generan las vetas en el mármol. Otra de las denominaciones de la técnica es “ebru art”. “Ebru” significa “nube”. Suponemos que tendrá relación con lo etéreo que es este procedimiento.

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En “No solo tendencias” nos enseñan a trabajar con esta técnica. Tomad nota:

 1.- Al agua se agrega previamente una sustancia blanca que se obtiene de la planta del tragacanto para espesarla y bilis de ganado para mantener la pintura arriba. Si no se dispone de estos elementos se utilizan sustancias químicas o cola blanca para espesar el agua.

2.- Cómo pigmentos se utilizan pinturas al oleo u otras que tengan base de aceite, que se mantienen en la superficie.

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3.- Para pintar sobre el agua, se pueden utilizar, alfileres, peines personalizados para algunas formas especiales, o cualquier instrumento fino con punta. Podemos utilizar utensilios de distinto grosor para dar un acabado más variado.

4.- Una vez que hemos creado el dibujo, se introduce un lienzo o una lámina de papel en el agua, y al sacarlo se habrá quedado estampado en el papel.

5.- Cada pieza creada en el agua, sólo se puede trasladar a un lienzo, por esta razón, cada creación en esta técnica es única. Esta es una de las razones de porque se cuida tanto el boceto, pues cualquier error puede estropearlo, y es tan valioso cada dibujo.