Julio Ventosela

Seguro que muchos de vosotros teníais en vuestra habitación uno de estos. El agua es importante hasta para jugar! Eran aquéllos juegos divertidos de verdad que confirmaban vuestra destreza y que no necesitaban pilas. 

Los juegos de agua ocupaban una parte importante de vuestro tiempo. En vuestra habitación, sobre la alfombra, os pasábais horas dándole que te pego al pulgar hasta que vuestra madre os gritaba aquéllo de: «A comer!». Veamos algunos:

Fijaos en este. Se podría decir que fue el origen de la Game Boy. Se parece ¿a qué sí? Había muchos de este tipo. Al principio os costaba un mundo pero después ya le pillábais el tranquillo. A base de desgastar el pulgar conseguíais superaros. No era fácil, os poníais nerviosos, pero al final salía. Como casi todo.

juegoagua4

¿Cuántos minutos os pasábais con la linterna de agua debajo de las sábanas? Era alucinante: además de un juego era útil cuándo faltaba la luz en casa. Cuando eso pasaba, y vuestros padres cogían la linterna «oficial», vosotros los seguíais con esta. Seguro que alguno de vosotros le desenroscó el tapón en algún momento para volver a llenarla. Anda que no estaría simpático llenarla con agua con gas de Sousas. ¿Os imagináis?

linterna

Estos eran mitiquísimos. Todo el mundo tenía uno. Estos si que eran complicados. Cuando con el dedo no conseguíais finiquitar el reto con éxito, le dábais vueltas hasta triunfar (con trampas). Yo tenía dos y reconozco, ahora que me acuerdo, que a veces los aparcaba. Me ponían nervioso. Lo que nunca llegué a entender es por qué siempre volvía a cogerlo. Ahora sí, lo pasaba pipa. Ahora los hecho de menos.

juego5

Estos son como los anteriores pero en «versión bolsillo». Si el otro era demasiado armatoste para llevarlo a la calle, llevabas este. Ahora, lo que toca, es ver a un niño en el restaurante con la Nintendo DS, antes nos llevábamos cosas así.

juegosagua3

Dígamoslo alto y claro: la mayoría eran de aquélla marca tan típica de nuestra época: Geyper. Gracias a ella y al agua lo pasábamos bien.